Ver nos acerca más al éxito que inventar

No siempre las grandes empresas o marcas empiezan por crearle la necesidad a los usuarios o consumidores por el producto que deseamos incorporar al mercado. Las más de las veces la necesidad ya existe, pero no hemos sido capaces de verla. Sin duda alguna resulta más práctico y útil afinar los sentidos para descubrir cuáles son esas necesidades o problemas, que podríamos resolver creando la solución, en vez de seguir llenando el mundo de necesidades insatisfechas.

Partimos de un ejemplo muy sencillo. Qué sucedería si en vez de comprar ropa, teléfonos y equipos nuevos constantemente, optáramos por buscar opciones más económicas, pero igual de funcionales. ¿Y acaso ya no lo hacemos? En ocasiones, hemos necesitado un equipo, pero no tenemos suficiente dinero para comprarlo nuevo. Entonces aparece algún amigo o familiar que ya no usa alguno de sus teléfonos, ofertamos un precio y problema resuelto. La necesidad ya existía y nosotros creamos la solución.

Incluso las grandes empresas telefónicas, abaratan los precios de equipos menos “novedosos”, cuando en la estantería resplandecen “los últimos modelos”. ¿Qué hacer? ¡Negocio! Los equipos, utilería y accesorios de segunda mano están esperando por una idea que los convierta en actividad comercial sin prejuicios, ¿por qué no la creas? La propuesta es ecologizar al mundo con tus ideas.

Lo mismo sucede con la infinita cantidad de apps, softwares y programas que salen a la palestra pública, creando necesidades sin dar óptimas soluciones. Está claro que cualquier persona con conocimientos básicos en programación puede crear una app, pero ¿Cuál? ¿Qué necesitan los consumidores y qué puedes solucionar tú?

Por ejemplo, la mensajería de texto y los correos electrónicos ya se inventaron, pero hasta qué punto el usuario puede dominarlos. Muchas veces pierden mensajes, se extravían en su bandeja de entrada y nunca encuentran lo que buscan. ¿Puedes ayudarlos? Recicla tus ideas e inventa una solución creando apps para gestionar de manera más óptimas los correos electrónicos, idea un software para protección o clasificación de datos, etc.

Ecologizar las ideas consiste en salir a buscar problemas y necesidades hasta encontrar uno o muchos que nosotros seamos capaces de resolver. En pleno siglo XXI sigue siendo más útil y rentable resolver problemas, que enfocándonos en crearlos para luego solucionarlos. Por eso te invitamos a construir soluciones ecologizando tus ideas.